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DEBATE ABIERTO, la página de Roberto Pérez Betancourt

Ancianos y asilos

Ancianos y asilos

Roberto Pérez Betancourt 

La población mundial se incrementó en los últimos 10 años y según estimados oficiales hoy rebasa los  siete mil 200 millones de seres humanos, cifra considerablemente alta, que seguirá expandiéndose, aunque a desigual ritmo regional, pero que de todas maneras indica la necesidad de  más alimentos, más atenciones sanitarias y más recursos de todo tipo para satisfacer necesidades existenciales.

 En Cuba, aunque la población no crece, si lo hace el segmento de la tercera edad, los mayores de 60 años, a  ritmo  elevado, fenómeno que implica la reducción del segmento  de personas aptas para el trabajo y la ampliación de la cantidad de cubanos que requieren cuidados especializados, pues hoy nuestro país es uno de los más envejecidos en la región.

 Según estimaciones demográficas, dentro de dos decenios  más del 30 por ciento de los cubanos en la Isla habrá rebasado las seis décadas. Es  un índice que  evidencia la expansión de las necesidades de recursos materiales en contradicción con  la disminución del potencial de fuerza laboral productiva, habida cuenta  en  Cuba la expectativa de vida es muy similar a la de países desarrollados.

  De acuerdo con especialistas,  cuando el cubano  llega a seis décadas tiene una esperanza de vivir  20 años más, y el que suma 80, puede aspirar a siete o más años entre los vivos.

  Sobre todos estos temas y sus complejidades se debatió del 28 al 30 de abril en el Palacio de Convenciones, en La Habana.

  La buena noticia es la asignación de nuevos recursos para la construcción y reparación de casas de abuelos y asilos de ancianos en provincias cubanas,  muy necesaria decisión para afrontar el devenir y sus retos poblacionales.

 Sin embargo, en opinión de este integrante del grupo septuagenario, lo más importante para la adecuada calidad de vida de los muchos que transitamos por edades avanzadas seguirá siendo la comprensión, el amor y la atención que prodigue la propia familia, en Matanzas y en todo el país.

 

 

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