Crisis económica y educacional en EE.UU.: contrastes
Roberto Pérez Betancourt
Cunde alarma en el sistema educacional público de EE.UU., porque los recortados presupuestos no alcanzan y se generalizan despidos de maestros, precisamente cuando la solicitud de matrícula aumenta, pues la crisis económica obliga a las familias a prescindir de los planteles privados ante la imposibilidad de costear los estudios de los hijos.
La prensa estadounidense refleja la difícil situación afrontada por la esfera escolar, asociada al alza del desempleo, con tendencia a agravarse, a pesar de infundados pregones sobre supuesta recuperación económica.
Por ejemplo, muy grave resulta el déficit presupuestario en California, donde los distritos escolares se preparan para despidos masivos y el enorme aumento de alumnos por aula. Otro tanto sucede en la Florida, informa la prensa plana y digital que se edita en Miami, como el Herald.
Elocuente es el reciente informe del Centro de Prioridades de Presupuesto y Política concluido en 41 estados. Se afirma enfrentarán insuficiencia presupuestaria a mitad de año ascendente a 35 mil millones de dólares.
Observadores acotan que de la asignación que la administración federal destinó al estimulo de la economía, la Educación recibió muy poco para estabilizar presupuestos estatales. Al principio se pudo paliar la situación, pero el dinero se agota y la crisis, lejos de menguar, se agudiza.
Lo dicho afectará negativamente la calidad del proceso docente-educativo, porque el despido de profesores y la escasez de insumos acarrean cierre de aulas e incremento de la cantidad de alumnos por unidad docente, pues los administradores se quejan de que ya no tienen de donde reducir gastos.
Como los recortes inminentes debilitarán aún más a las escuelas públicas, se ensancharán la brecha entre los resultados académicos de los distritos ricos y los pobres, ahondando las ya acentuadas diferencias de clase en el acceso a la instrucción y a la educación, fenómeno que tipifica la injusticia social en economías de mercado capitalista.
Contrasta lo anterior con la atención que el Estado cubano brinda a su sistema educacional, universal y gratuito, que garantiza progresión de estudios al término de cada nivel de enseñanza, tomando en cuenta los resultados académicos individuales, expresivos de la aplicación y la asimilación de conocimientos por parte de los estudiantes.
Esta realidad es posible sobre la base de prioridades que establece la voluntad política, a pesar de que la Isla también afronta la severa crisis global, añadida al bloqueo económico, comercial y financiero que le impone EE.UU.
Aunque Cuba es país pobre, el derecho constitucional a la educación es inalienable y sus bases institucionales garantizan la igualdad de oportunidades al talento individual, sin distingos políticos ni sociales.
3 comentarios
FANTOMA -
roberto -
Carlos Alvarez -
Vives en una burbuja con medias verdades filtradas por un Intranet que te esclaviza.
En la libertad de mi pais, podrias llegar a ser buen periodista.