La Crónica, protagonista este jueves en Peña periodística en Matanzas
Roberto Pérez Betancourt
La Peña periodística Debate Abierto, de este jueves 27 de mayo, a partir de las dos de la tarde en la casona de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), tendrá como protagonista al género Crónica, ejercicio de periodismo en vivo en el que los asistentes brindarán opiniones y presentarán sus creaciones, con el propósito que anima a este espacio coloquial de enriquecer el acervo técnico-periodístico de profesionales y estudiantes, esta vez referido a un género que para reconocidos maestros del periodismo es el más difícil entre todos. la colega Yirmara Torres, vicepresidenta de la UPEC en Matanzas -en la foto-, anuncia sorpresas.
También se conversará sobre la campaña difamatoria contra Cuba, y se intercambiarán criterios en relación con contenidos, interactividad y dinamismo de las weblog personales en Internet, informática, conectividad y otros temas de interés para todos.
La Edición de un boletín electrónico de la Peña Periodística, especializado en afines; el intercambio de conocimientos y materiales de estudio, y la actualización sobre concursos y otras convocatorias también serán asuntos que abordará esta Peña, en la que no faltará el pastel, conversación informal, reencuentros entre amigos y el calor fraternal que caracteriza a la gran familia de los comunicadores de los medios de difusión masiva en Matanzas.
En torno al género Crónica *
Es este posiblemente el más polémico de los géneros periodísticos. ¿De qué se trata? En primer lugar de ponernos de acuerdo sobre lo que estamos abordando. Difícil, porque a través de los años, enjundiosos teóricos de "lo periodístico", empíricos cultivadores de crónicas laureadas y escribidores varios no han coincidido en nada, o en muy poco, o han discrepado unos de otros de manera radical al teorizar e intentar ponerse de acuerdo para definir qué es y cómo se arma una crónica.
Sucede que el argot tradicional alude a variados tipos de crónicas, atendiendo a los temas que aborden: crónica deportiva, cinematográfica, social, roja... En realidad esos trabajos corresponden más bien al género de reseña informativa. Al analizarlos se comprueba que en la mayoría de las ocasiones se trata de una información de descripción cronológica en la que se insertan breves comentarios o glosas. Así la reseña deportiva trata el desarrollo de eventos de ese tipo y el autor los comenta progresivamente; la cinematográfica se refiere al mundo del cine, estrenos de películas, y asuntos concomitantes; la social versa sobre el mundillo de bodas, bautizos, cumpleaños, aniversarios y otras fiestas. Son noticias destinadas a un público reducido y los interesados de alguna forma pagan para que se publiquen. La crónica roja trata sucesos policíacos de toda índole y toma su calificativo de los hechos sangrientos, de los cuales la prensa sensacionalista en las economías consumistas hace grandes despliegues para llamar la atención y vender más.
Evidentemente, el género Crónica, como actualmente se siente, es otra cosa. Si ya vimos lo que no es, intentaremos identificar algunos rasgos de lo que es, a partir de un análisis estilístico y de contenido.
Se trata de un trabajo periodístico que parte de un hecho de actualidad, o que intencionalmente se vincula a ésta en fechas conmemorativas de eventos que en su día causaron gran repercusión (efemérides, aniversarios...) La crónica ofrece una valoración íntima, e intenta comunicar un sentimiento en el destinatario mediante recursos literarios que sensibilicen las fibras emocionales y produzcan un tipo de reacción afectiva.
No existen patrones técnicos cerrados para la elaboración de crónicas, en tanto se trata de una creación de muy personal estilo, aunque se observa la recurrencia a fenómenos contrastantes, tales como las comparaciones. Generacional: padre-hijo; abuela-nieto... Social: pasado-presente; discriminación-accesibilidad; analfabetismo-oportunidad de estudiar; injusticia-justicia... Volitiva: vejez-juventud; minusvalidez-proeza, etc. Se trata de recursos de fundamento para dramatizar el suceso dentro de la mesura y los límites marcados por el talento artístico del cronista, porque, como bien han hecho notar calificadas plumas, confeccionar una crónica (escrita, radial, televisada o en los cibermedios) es como soplar vidrio para hacer una fina copa, al más mínimo descuido: exceso, defecto, sobredimensión, hiperbolización, cursilería o sensiblerismo, se quiebra, desaparece. Sobre esto, un destacado cronista ha escrito:
"La sensibilidad, la inspiración, la emoción, son aspectos muy importantes de la condición humana, que todo aquel que escriba debe cuidar con suma atención. La sensibilidad periodística, ese radar para captar lo mejor de lo que nos circunda, procesarlo en letras e imágenes y después devolverlo con digna afectividad comunicativa, ha de ser objeto de tratamiento especial. Convencido estoy que esa sensibilidad, que tiene mucho de artística, nos acompaña, en mayor grado o menor, desde nuestros primeros movimientos en la vida. Pero ya, como herramienta del desenvolvimiento profesional, necesita de un lazarillo que guíe sus pasos por el mejor camino, o de lo contrario corre el riesgo de convertirse en sensiblería barata. De lo anterior no puede desprenderse la idea de "sensibilidad como don divino", capaz de armar maravillosas estampas, sino de recurso de primer orden que puede salvarnos o hundirnos" (11).
La crónica admite el diálogo, la reflexión; describe y narra una historia real y la matiza con ingeniosidad sugerente, interpreta, da noticia, puede ser corta o extensa, en dependencia del asunto y del aire creativo del cronista, que debe cuidar de no pasarse ni de quedarse corto. De eso se trata, porque la copa se puede romper... (TVY) (26/05/10)
(* En torno al género crónica: Tomado del libro Dinámica de la Noticia © de RPB.
13 comentarios
SUPERMAN -
FRANCAMENTE NO ME IMPORTA BATISTA NI TAMPOCO EL PASADO TENEMOS QUE PENSAR EN EL FUTURO,BUSCAR UNA NUEVA FORMULA PARA UNA VIDA MEJOR Y QUE TODAS LAS FAMILIAS NO CARESCAN DE NADA EN LO ABSOLUTO.EL RESPETO ES LO QUE HACE A LA PERSONA Y LA IDENTIFICA SEA BOCON O NO.DIALOGANDO LAS PERSONAS SE ENTIENDEN MEJORES SI PODEMOS COMUNICARNOS PODEMOS OPERAR.LAS OPINIONES SON COMO LAS NARICES TODO EL MUNDO TENEMOS UNA,EN EL 1959 EMPEZO OTRA NUEVA PEZADILLA LA DE LOS HERMANOS CASTROS NO QUIERO SABER DE BATISTA TAMPOCO ME INTERESA LA DICTADURA CASTRISTA.CUBA MERECE UN SYSTEMA NEUTRAL DONDE SUS CIUDADANOS SEAN LIBRES DE TODO LOS ASPECTOS.TODO SER HUMANO DEBE SER RESPETADO Y SUS OPINIONES DEBEN SER RESPETADAS, TAMBIEM SUS MANERAS DE PENSAR DANDOLE UN CHANCE A LA EXPRESION.ROBERTO NINGUN CIUDADANO DEBE SER ESCLAVO DE NINGUN REGIMEN SEA QUIEN SEA Y A DONDE SEA.LIBERTAD ES CUANDO UN CIUDADANO SE EXPRESE LO QUE PIENSA SIN TENER NINGUN TIPO DE MIEDO Y HABLAR DE CUALQUIER TEMA SI TENER QUE SER ENCARCELADO.LAS DAMAS DE BLANCO SEAN QIEN SEAN DEBEN DE SER RESPETADAS AUNQUE SEAN BOCONAS HAY QUE RESPETAR LA LIBERTAD DE EXPRESION SI NO ES ASI NO HAY LIBERTAD.OH NO ME DISTES TU CORREO COMPLETO? YAHOO QUE.
Roberto -
SUPERMAN -
Roberto -
SUPEMAN -
carlos Alvarez -
anonimo -
Fijate si ustedes estan desubicados en su funcion social, que no entienden que tienen que ver los acontecimientos mas importantes que estan pasando en su pais con una pena periodistica. Es como para morirse de risa. De que debemos hablar? del fracaso de la Zafra? o de su fiestecita para hablar de la libertad de hablar lo que les permiten?
No sean ridiculos.
SUPERMAN -
LOS PERIODICOS DE LA ISLA AQUI EN CUBA ANUNCIAN,COMENTAN LO QUE LE CONVIENE AL REGIMEN Y ESO USTED LO SABE MEJOR QUE NADIE.EN CUBA LA EXPRESION ESTA CONTROLADA USTED PUEDE IR PRESA POR PENSAR DIFERENTE Y EXPRESARSE LIBREMENTE NO EXISTE.CUANTOS PRESOS HAY ENCARCELADOS POR EXPRESARSE LIBREMENTE.LA NOTICIA EN CUBA ES LIMITADA TODO TIENE QUE IR A FAVOR A LA REVOLUCION SI NO ES ASI LA COSIDERAN COMO CONTRA REVOLUCIONARIA COMO UNA GUSANA Y PAGADA POR EL IMPERIO.LAS DAMAS DE BLANCO TIENEN UNA POPULARIDAD EN EL MUNDO ENTERO, INTERNACIONAL,SON RESPETADAS POR SUS CAUSAS Y SUS DERECHOS.
AL FIN AL CABO PERIODISTAS QUE SON MAJISTRADO POR UNA DICTADURA Y OBLIGADOS A COMENTAR SOLAMENTE LO QUE LES BENEFICIA A ELLOS NO SON PERIODISTAS SON SOLDADOS DE LA PRENSA.
barbarisima -
Solo buscan un pretexto y un espacio para desvirtuar a Cuba.
Me gustaría ver los títulos academicos de los "periodistas independientes" me gustaría saber si le subieron el salario a la Damas de Blanco...
anonimo -
Grupo de los 75, Prisión provincial de Canaleta, Ciego de Ávila
Desde día atrás se viene hablando y especulando sobre la posible excarcelación de nosotros, los integrantes del grupo de los 75 que aún permanecemos secuestrados como rehenes del totalitarismo castrista. Si las libraciones se hicieran realidad no será debido a ningún gesto humanitario ni de buena voluntad del régimen comunista cubano, no, no, no. Si no que serán resultado del trágico martirio de nuestro compañero de lucha Orlando Zapata Tamayo, del valeroso altruismo de nuestro caro hermano de la disidencia interna Guillermo Coco Fariñas, de esas ejemplares hermanas que son las Damas de Blanco y sus correspondientes Damas de apoyo y por supuesto- debido a los propios errores y horrores del régimen castrista.
Personalmente no tengo como lo más importante mi posible liberación o la continuidad de mi condena, sino y esto sí es trascendental- el establecimiento de un marco de total respeto a los derechos inherentes a la libertad de la persona humana, para todos los cubanos. Precisamente tratando de alcanzar ese objetivo nosotros terminamos en las ergástulas comunistas, por nuestra pacífica lucha a favor de la verdad, la libertad, la justicia, el amor y para que prosperara en nuestra patria el estado de derecho. Yo gustoso quisiera ser el último preso político de conciencia en la mayor de las Antillas, pero sin olvidar en estos momentos la paradigmática sentencia de nuestro Titán de Bronce la libertad no se mendiga, se conquista con el filo del machete.
SUPERMAN -
anonimo -
Cuando Gorbachov, por aquellos años, asumió la jefatura del Kremlin, Raúl se enamoró de los cambios iniciados por el soviético y completó su receta: una buena gerencia, unida a una profunda reforma del Estado, con especial énfasis en la descentralización, servirían para salvar el comunismo. Hizo traducir el libro Perestroika y lo repartió entre muchos de sus oficiales. El iba a rescatar el sistema y a resolver un enigma que lo dejaba perplejo: por qué unas sociedades con tanto capital humano --abundaban las personas bien educadas y saludables-- eran tan improductivas.
Raúl Castro, al fin y al cabo, tenía razones para sentirse optimista y confiado: bajo su dirección las Fuerzas Armadas cubanas se habían convertido en el noveno ejército del planeta y habían triunfado en Angola y Etiopía. Desde su perspectiva de ministro de Defensa (entonces ya llevaba un cuarto de siglo en el cargo), de la mano de Moscú aquella pobre islita, que generaba tan poca riqueza, se había transformado en una potencia militar de rango mundial. Quien había llevado a cabo esa proeza muy bien podía realizar la otra: desarrollar a Cuba en el terreno económico. Raúl no entendía que destruir un puente a cañonazos era infinitamente más fácil que construirlo.
Gorbachov padecía el mismo error de Raúl: era un apparatchik inteligente, experto en cuestiones agrícolas, y conocía las deficiencias del Estado comunista. Sabía lo que funcionaba mal y creía que podría corregirlo con una mezcla de reformas y gerencia sofisticada. Le molestaba escuchar que su enorme país, con más del doble del tamaño de Estados Unidos e ingentes riquezas naturales, era despectivamente calificado como ``Bangladesh con cohetes atómicos''.
Poco antes del derribo del Muro de Berlín en 1989 y de la disolución de la URSS en 1991, ya Gorbachov, no sin cierta melancolía, había descubierto su error fundamental: el sistema no era reformable. Sencillamente, el colectivismo estatista, dirigido y planificado por los burócratas del Partido, conducía al empobrecimiento creciente y no lo podían salvar los tecnócratas, aunque estuvieran muy bien intencionados. Si lo que se buscaba era desarrollo, competitividad y prosperidad para las masas, había que olvidar la utopía comunista e imitar a las naciones situadas a la cabeza del planeta.
Raúl Castro está hoy exactamente en el mismo punto en el que se encontraba Gorbachov a fines de los ochenta. La producción de azúcar ha caído a niveles de hace más de cien años y el país, en plena degradación material, ni siquiera puede alimentarse. ¿Por qué? Por seis razones que no puede resolver con el modo comunista de producción:
1. Sin una moneda fuerte que mantenga su valor y poder adquisitivo las transacciones económicas son como arar en el mar.
2. Sin propiedad privada, los individuos no conservan la riqueza material creada ni se esfuerzan en crear más. El ``bien público'' es una risueña fantasía. Sin empresa privada no hay desarrollo.
3. Sin un sistema de precios regidos por la oferta y la demanda es imposible asignar eficazmente los recursos disponibles. Los precios fijados por el mercado son el lenguaje con que espontáneamente se expresa la economía. Esto no es un caprichoso dogma ideológico sino una observación mil veces confirmada en el mundo real.
4. Sin libertad económica y sin reglas claras que faciliten la creación de empresas, obstaculicen la corrupción y premien el ahorro y la inversión local y extranjera, jamás se dará la generación de riquezas de forma sistemática.
5. Sin un ordenamiento jurídico y un poder judicial eficaz, equitativo e independiente que resuelva los inevitables conflictos, castigue a los culpables, proteja los derechos de las personas y dé seguridades, no es posible el sostenimiento de una sociedad próspera.
6. Sin transparencia y rendición de cuenta de los actos de gobierno, y sin funcionarios colocados bajo la autoridad de la ley, guiados por la meritocracia y legitimados en elecciones periódicas, tampoco se consigue alcanzar unas cotas decentes de desarrollo.
¿Está listo Raúl Castro para admitir estas amargas verdades o prefiere seguir poniendo parches inútiles que no evitan el hundimiento de la nave? En su momento, Raúl dijo que no lo habían ``elegido'' para enterrar a la Revolución, sino para mejorarla. A estas alturas ya sabe que eso es imposible. Es el mismo dilema que Gorbachov debió enfrentar: o renuncia al disparatado modelo comunista o se empeña en mantenerlo y destroza a Cuba aún más. Hasta ahora todo indica que Raúl prefiere morir en el error aunque les deje a los cubanos un país en ruinas. Eso se llama ensañamiento.
anonimo -
Allá se le conoce como Ley SB 1070, aquí lleva el nombre de Decreto- Ley 217. Permanecer fuera del lugar de residencia sin el correspondiente permiso, expedido por las autoridades policiales, representa un quebrantamiento de las disposiciones establecidas.
El otorgamiento de la licencia temporal para habitar en una dirección que no sea la que figure en el carné de identidad, puede no ser concedido si así lo estiman los responsables de supervisar un decreto que ha afectado a miles de cubanos desde su aprobación, hace más de una década. O sea, que la autorización forma parte de un proceso donde a menudo intervienen prejuicios personales, entre otras aberraciones, a partir de las interpretaciones de los funcionarios.
Según los creadores del engendro jurídico que penaliza la estadía en Ciudad de La Habana de las personas que habitan fuera de sus límites, si no se someten a las regulaciones aprobadas por las instancias pertinentes, la ley 217 se fundamenta en la necesidad de detener el traslado masivo de ciudadanos hacia la capital en busca de mejores condiciones de vida.
Son varios los medios coercitivos utilizados contra los infractores. Uno de ellos es la detención durante varios días en cualquiera de las decenas de penitenciarías que funcionan en La Habana, para posteriormente ser objeto de un embarque forzoso en tren, rumbo a algunas de las localidades cercanas a sus lugares de origen. En el viaje de retorno soportan vejaciones, entre otros excesos, a partir de su inclusión en la categoría de expulsados.
También dentro del arsenal de la policía para castigar a los desobedientes, aparecen las multas y hasta condenas a prisión por el delito de desobediencia. He tenido la oportunidad de conocer a decenas de personas que han sido afectadas por esta ley, siendo residentes permanentes de la capital. Su presunta transgresión se basó en quedarse a dormir en casa de un familiar por espacio de varios días sin el consentimiento de las autoridades. En estos casos, el castigo se extendió al anfitrión, por dar cobija a personas que no aparecen en los registros de dirección, donde están anotados los nombres de los miembros de los núcleos familiares que habitan en la cuadra.
Podría parecer una invención, pero en las dictaduras totalitarias suceden cosas inexplicables a partir del análisis basado en la lógica elemental. Para quienes conocen estas anormalidades, la reciente declaración de la Comisión de Relaciones Internacionales de la Asamblea Nacional del Poder Popular, criticando los efectos discriminatorios y arbitrarios de la Ley SB 1070, resulta un acto de desvergüenza e hipocresía.
Por quedarme a dormir con mi esposa en la casa de su tía fue que conocí la ley 217. Tres multas y la amenaza de ser llevado a los tribunales si continuaba incurriendo en el delito. Aunque ya ha pasado bastante tiempo desde que tuvieron lugar esos incidentes, no olvido las penalidades sufridas por tal decisión. Para colmo de males, todavía la injusta medida forma parte del cuerpo legal de la nación.