Elecciones en EE.UU.: Economía y Pandemia se alinean contra Trump

Roberto Pérez Betancourt 

El galopante desempleo como consecuencia de malas decisiones gubernamentales, unido a los negativos efectos multilaterales de la pandemia de la COVID-19, agravados igualmente por el desastroso desempeño del señor Donald Trump en el Poder Ejecutivo, podrían costarle la reelección, a la que tanto aspira, lo que se refleja en los resultados de las encuestas en esta fecha, que lo ubican 5,5  puntos porcentuales promedio por debajo de Joe Biden, quien no debe afrontar problemas para obtener la candidatura oficial del Partido Demócrata.

Cuando faltan poco más de cinco meses para los comicios generales en Estados Unidos, la ventaja de Biden se acentúa en estados que podrían marcar la diferencia en el conteo de votos, como Pennsylvania, donde el ex vicepresidente de Barack Obama saca hoy 6.5 puntos porcentuales de ventaja al señor Trump; en la Florida 3,3 y en Wisconsin 2,7, de acuerdo con los cómputos del sitio https://www.realclearpolitics.com/

En este contexto, analistas destacan que la situación económica en estos momentos representa la mayor debilidad para Trump, y mencionan la galopante tasa de desempleo que alcanza indicadores sin precedentes en el país más armado y beligerante del mundo   con más del 20 por ciento, al tiempo que el Producto Interno Bruto (PIB) se derrumba, factores que históricamente han significado la ruina para las aspiraciones de un presidente que desea reelegirse en el cargo.

En realidad, antes de la aparición de la Covid 19, la situación económica en la nación norteña marchaba bien, para muchos producto de la herencia de medidas adoptadas por Barack Obama, antecesor de Trump, y que este capitalizaba a su favor. Pero a partir de la aparición de la Pandemia  en el escenario estadounidense y las erráticas conductas del rubio despeinado al no escuchar a los expertos, y recomendar a la población que adoptase acciones irresponsables, como las de beber o inyectarse desinfectantes, acciones calificadas de estúpidas, han marcado   el descrédito del mandatario entre los científicos, sus propios funcionarios y en general el público, y consecuentemente  el descenso estrepitosoen las encuestas.

Esta realidad acaba de reflejarse en un modelo electoral nacional publicado recientemente por Oxford Economics, en el que se revela que la recesión, influenciada por los efectos  del coronavirus, causará que Trump sufra una “derrota histórica” en noviembre.

El modelo se fundamenta en los indicadores de  desempleo, el ingreso disponible y la inflación para pronosticar los resultados electorales,  y predice que Trump perderá por mayoría absoluta, capturando solo el 35% del voto popular, pronóstico muy diferente al que ofrecía el modelo ante de la crisis pandémica, cuando afirmaba que  Trump ganaría aproximadamente el 55% de los votos.

De cumplirse el nuevo vaticinio,  sería el peor desempeño para un presidente en ejercicio en un siglo.

“Se necesitaría un milagro económico para que los bolsillos favorecieran a Trump”, escribió Oxford Economics en el informe, y agregó que la economía será un “obstáculo casi insuperable para Trump en noviembre”.

El modelo ha predicho correctamente el voto popular en todas las elecciones desde 1948 exceptuando 1968 y 1976 (aunque dos candidatos perdieron el voto popular pero ganaron la presidencia en ese lapso, incluidos George W. Bush en 2000 y Donald Trump en 2016), indican expertos.

Un modelo electoral independiente con base en los estados, administrado por Oxford Economics, que incorpora las tendencias económicas locales y los precios de la gasolina, predice que Trump perderá gravemente el colegio electoral por un margen de 328 a 210. Ese modelo pronostica que siete estados en el campo de batalla cambiarán a los demócratas: Iowa, Wisconsin, Michigan, Pennsylvania, Ohio, Missouri y Carolina del Norte.

“Esperaríamos que estos estados experimenten contracciones económicas significativas y pérdidas de trabajo traumáticas que probablemente cambiarían el voto de bolsillo”, dijo el informe.

Oxford Economics desarrolló el modelo estatal el año pasado. Habría predicho correctamente la molesta victoria electoral de Trump, así como siete de las nueve elecciones anteriores desde 1980.

Pero quienes desean ansiosamente la salida del peor presidente que ha sufrido Estados Unidos en toda su historia, no pueden tocar campanas a revuelo, porque un modelo económico para predecir resultados electorales solo marca ciertas tendencias, que a cinco meses y medio de los comicios pueden sufrir cambios.

De  pronto, en la agenda de Trump para combatir los reveses, se identifica una guerra sin cuartel para desprestigiar a la anterior administración de Barack Obama con su vice Joe  Biden; la autoacreditación del mérito por la entrega multimillonaria de ayudas económicas a los votantes, en realidad aprobada por el Congreso bicameral, y un amplia campaña para sacar a relucir “trapos sucios” sobre presuntas conductas desordenadas de Biden en el ámbito amoroso…

Para  Oxford Economics, el impacto de la Pandemia en lo que resta de tiempo antes de las elecciones podría ser determinantemente.  Trump incluso podría llegar a perder Florida, Texas, Arizona, Tennessee y Georgia. Pero si se produce una recuperación económica significativa y el electorado demócrata no acude a las urnas, entonces el señor multimillonario podría dar rienda suelta a su soberbia y salirse con la suya de coronarse otro período en la Casa Blanca.

Para evitar ese escenario, se producen alianzas en los sectores progresistas de la sociedad estadounidense, en las que resultan de mucho interés los respaldos de Bernie Sanders, que arrastra buena parte de la intención de votos de afronorteamericanos y jóvenes en general, y del propio Barack Obama, cuyo prestigio, a pesar de las diatribas de Trump, sigue en alto, de acuerdo con analistas.

Tiempo al tiempo: indocumentados, millones de estadounidenses en el grupo de pobreza extrema, desempleados, enfermos sin seguro médico; estudiantes sin becas ni posibilidades de acceder a estudios medios y superiores, y una larga etcétera de elementos sociales que desean la salida de la “pesadilla Trump” del poder Ejecutivo, se alinean frente a los millonarios y sectores de clase alta, transnacionales que comercian con armas y hacen  de  la guerra su campo fértil, y muchos otros aspirantes al hacha del verdugo, en una competencia rodeada de lentejuelas, campañas publicitarias donde  vale  todo en la que Señor Don Dinero es el que más  vota. (TVY) (Con informaciones de sitios especializados en encuestas y archivos del redactor)(26-05-20)