Círculos de los que no se rinden
Roberto Pérez Betancourt
Los círculos de abuelos suelen agrupar a personas mayores de edad que no se rinden ante los apremios y pruebas que la vida les impone a través del tiempo, y conservan el espíritu joven, renovando propósitos, a veces con la lágrima colgada a la espalda…
La respuesta eficaz de hoy para añadir más calidad de vida a los años es realizar ejercicios físicos sistemáticos y practicar hábitos saludables, a lo que contribuyen los círculos de abuelos.
Cuando se conversa con personas de más de 60 años, que en muchos casos avanzan después de haber apagado 70 y más velitas de cumpleaños, sus experiencias coinciden en que la práctica habitual de ejercicios, acordes con sus respectivas edades, ha contribuido a suprimir dolores articulares, mejorar la agilidad física y regenerar funciones orgánicas que se creían perdidas, al tiempo que se eleva la autoestima y la alegría de vivir.
Conservo en mi memoria y archivo numerosos testimonios de lo dicho antes, los cuales suelo renovar de vez en cuando. Adriana, una delgada octogenaria, hábil aún en el manejo de la vara que la acompaña en cada movimiento de su cuerpo, bien temprano en la mañana, cuando junto a decenas de vecinos ensancha los pulmones con aire fresco y se dispone a tomar el sol benefactor, confiesa que su alegría de vivir se ha regenerado.
Para Cándido Ferrals, juntarse cada día con sus amigos de la tercera edad avanzada, como él califica a quienes superan los 70 abriles, además de propiciarle intercambiar noticias a escala mundial, hablar de pelota y contar anécdotas de los nietos, es momento especial, porque se olvida de los achaques y se siente en familia.
Agustina Pérez dice que botó los cigarros y ahora respira mucho mejor, pero conserva los pomitos con analgésicos como reliquias, porque los dolores aprendió a amortiguarlos con calistenia de la que enseña el instructor, que, además –comenta picaresca— “está de muy buen ver…”
Razón tienen los expertos cuando recuerdan que hacer ejercicios, además de agilizar los miembros y eliminar toxinas, alegra el espíritu y devuelve sonrisas extraviadas, porque es cuestión de ciencia, paciencia y voluntad, fórmula que se traduce en más salud física y mental…
0 comentarios