Elecciones en EE.UU.: No solo la presidencia

Roberto Pérez Betancourt

-Hora y media de debates  contra las cuerdas

-Donald Trump puede No llegar a los comicios como candidato

Por lo general se cita el 8 de noviembre como fecha de las venideras elecciones presidenciales en Estados Unidos. Los principales  candidatos, Hillary Clinton, por el Partido Demócrata, con ventaja de más del 6 por ciento sobre el controversial Donald Trump, de los Republicanos,  se disputan la silla que hoy ocupa Barack Obama.

 El que gane se sentará en ella  el 20 de enero del año 2017.

 Hoy las mejores posibilidades se inclinan hacia la señora Clinton, en momentos en que Trump incluso puede no llegar como candidato al día de los comicios, pues las revelaciones de sus actos ofensivos hacia las mujeres  han motivado que prominentes figuras políticas del Partido Republicano le hayan retirado su apoyo, e incluso amenacen con medidas disciplinarias que lo excluyan de la candidatura cuando  resta menos de un mes para el ejercicio del sufragio.

  Pero lo cierto es que además del Poder Ejecutivo, quienes puedan ejercer el derecho al voto también podrán hacerlo por algunos de los 435 aspirantes a la cámara de Representantes y de los 34 senadores (un tercio de esa cámara alta).  

  Ese día igualmente se disputarán 11 gobernaturas y cientos de posiciones políticas a diferentes instancias.

  Expertos recuerdan que  el 8 de noviembre los votantes en algunos estados de  la Unión podrán marcar preferencias en relación con algunos referéndums, que van desde la legalización de la mariguana, hasta condiciones medio ambientales y laborales.

   Pero no hay dudas que es la elección del Presidente la que acapara titulares, en un contexto en el que para ganar no se necesita la mayoría de los votos populares, como  ha ocurrido antes en cuatro ocasiones, la última  en el año dos mil, cuando Al Gore, demócrata, sacó más de medio millón de votos populares por encima  del republicano George W. Bush, pero fue este quien se sentó en el trono de la Casa Blanca por obra y gracia de los vericuetos electorales del vecino norteño, pues, a decir de expertos “no todos los votos cuentan ni son contados”. 

   Lo cierto que cada uno de los 50 estados de la Unión, más el Distrito Federal,  tiene sus propias reglas electorales.

  Excepto en dos de ellos, quien gane  el voto popular se lleva todos los llamados “votos electorales”. En total se eligen a 538 personas que conforman el colegio electoral y en términos populares  son las que “cortan el bacalao”, es decir, los que deciden quién será el presidente, de manera que para ser electo se requieren no menos de 270 de esos votos, no la mayoría de los populares.

  Recordemos, además, que hoy la mayoría en ambas cámaras pertenece a los republicanos. Dentro de menos de un mes sabremos los resultados. (TVY)(11/10/16) 

 Hora y media de debates con Trump contra las cuerdas

Fueron 90 minutos de una tensión que congeló la sonrisa de Hillary Clinton y convirtió a Donald Trump en una nariz esnifando constantemente.

Una hora y media en la que Donald Trump acusó a Bill Clinton de haber sido “el peor abusador de mujeres” y a Hillary Clinton de haberle encubierto.

Sin embargo, tras una hora y media de continuos ataques, el candidato republicano fue incapaz de mandarla a la lona con una acusación que ha intentado contrarrestar los ataques que lo han reducido a un “acusador sexual”, luego del video difundido por The Washington Post el pasado viernes.

En un debate, con formato de cabildo y con la presencia de electores en el estudio, Hillary Clinton consiguió resistir los embates de su contrincante republicano y, además, dejarlo en evidencia como un candidato poco preparado.

A manera de ejemplo, la forma en que Donald Trump insistió en la necesidad de reforzar la seguridad de la frontera con México, para evitar que “ilegales criminales” sigan inundando Estados Unidos.

Trump respondió así a Clinton cuando ésta advirtió sobre el peligro de la retórica islamofóbica que es utilizada por los terroristas para reclutar a su gente.

“Cuando se trata de vigilar y tener más cuidado con la gente que viene de fuera, tenemos que asegurar la frontera con México porque vienen criminales y traficantes de drogas”, aseguró Trump.

En un duelo precedido por una conferencia de prensa, en la que Donald Trump ofreció una pista de sus intenciones, el tema de los presuntos abusos perpetrados por el ex presidente, Bill Clinton, fueron utilizados como pararrayos por el republicano para evitar el hundimiento de su campaña y para distraer el foco de la atención que le ha costado el abandono de más de 150 republicanos.

En la rueda de prensa, Trump salió rodeado de Juanita Broaddrick, Kathleen Willey, Kathy Shelton y Paula Jones. “Como ha dicho el señor Trump. Las palabras cuentan más que las acciones. Y Bill Clinton me violó y Hillary Clinton me amenazó.

“Eso no tiene comparación” con las acusaciones que se han lanzado contra Donald Trump, aseguró Juanita Broaddrick, la mujer que se ha convertido en estandarte y pararrayos de la campaña del magnate para tratar de contrarrestar la oleada de ataques, críticas y abandonos desde la cúpula del partido republicano.

En una primera parte dominada por los insultos, las acusaciones y las continuas interrupciones de Trump, Hillary Clinton consiguió neutralizarlo momentáneamente cuando le soltó: “Donald todos sabemos que lo único que quieres es distraer la atención de su campaña que está explotando”.

Tras el fin de este segundo duelo, no parece claro que Donald Trump conseguirá evitar el abandono de nuevos miembros del partido republicano, en medio de una crisis que pondrá a prueba su campaña en el curso de los próximos días.

Por su parte, Clinton confiaba en mantenerse a la cabeza de las encuestas que a nivel nacional le siguen favoreciendo, mientras también avanza en estados que serán cruciales como Florida, Colorado, Nevada, Virginia y Carolina del Norte, entre otros.

 Donald Trump puede No llegar a los comicios como candidato

El controvertido magnate norteamericano recibió el peor golpe contra sus aspiraciones a la Casa Blanca tras la difusión de un video en el cual despotrica sobre una mujer casada y embarazada a la que quiso seducir.

 El candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, podría ser expulsado de su propia campaña electoral en Estados Unidos y se especula con la probabilidad que le sustituya su compañero de fórmula Mike Pence.

Este viernes Trump recibió el peor golpe a sus ambiciones presidenciales, después de que se publicara un video en el cual el magnate mediático habla de manera vejatoria sobre una mujer casada y embarazada a la que quiso seducir y expresa comentarios ofensivos sobre el sexo femenino.

Pocas horas después del incidente el aspirante a la Oficina Oval difundió un comunicado público con una disculpa general donde dijo «me equivoqué, lo siento» y pidió a los votantes mantener la confianza en él, lo que se entendió como un intento de conservar sus opciones camino a los comicios de noviembre.
El político estadounidense comentó que «nunca dije que fuera perfecto, he dicho y he hecho cosas que lamento, pero esas frases no reflejan quién soy, así que lo siento y pido disculpas», según publicó Russia Today.

Después de que se revelara la filmación en la que se escucha a Trump presumiendo de que besa y manosea a las mujeres sin preguntarles, su compañero de fórmula, Pence -que se define como cristiano-conservador- celebró un evento político en Ohio donde actuó como si no hubiera pasado nada e ignoró a periodistas que le preguntaron sobre el tema.

En la grabación de 2005, publicada por The Washington Post, Trump dice que intentó seducir a una mujer casada unos meses después de su boda con Melania y aseguró que debido a que es famoso, puede «besar a las mujeres en la boca y agarrarlas por la vagina».

Las reacciones a sus palabras han superado cualquier expectativa y provocaron un enorme revuelo en los medios de comunicación y las redes sociales.

De hecho, hasta el propio Partido Republicano ha anunciado que, debido a sus palabras enfermizas, su candidato no podía participar en el evento de la formación, que tuvo lugar este sábado en Wisconsin.

El senador Mark Kirk, de Illinois, escribió: «Donald Trump tiene que renunciar y el Partido Republicano debe adoptar reglas de reemplazo de emergencia».

A su turno, el vocero de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, emitió un comunicado en el que señaló: «Lo que oí hoy me revuelve el estómago. Las mujeres deben ser celebradas y reverenciadas, no objetificadas».

También el presidente del Comité Nacional Republicano, Reince Priebus, condenó las observaciones de Trump. Por su parte, el senador por Arizona, John McCain, dijo que «no hay excusas para los comentarios ofensivos y degradantes de Donald Trump».Con informaciones de Cubadebate y Rusia Today.