Ku Klux Klan: se aviva el odio de la mano de Donald Trump

 Roberto Pérez Betancourt

Evidentemente estimulados por las políticas xenofóbicas y el estilo soberbio antinmigrante que practica y preconiza el actual rubio presidente estadounidense, Donal Trump, los integrantes de la secta conocida como Ku Klux Klan (KKK)(*) han tomado nuevos impulsos en su habitual política de odio racista y envalentonados vuelven a ganar espacios en los medios de difusión donde se amplifican sus excesos y los enfrentamientos con manifestantes que se oponen al retorno del fuego y la horca improvisados.

Aliados y partícipes de las propias organizaciones conocidas como supremacistas blancos, integrantes del KKK han protagonizado recientes manifestaciones en la ciudad de Charlottesville, estado de Virginia, donde al menos tres personas perdieron la vida y dos decenas resultaron heridas, de acuerdo con reportes de agencias noticiosas, que mencionan la tibieza con la que el usufructuario de la Casa Blanca ha tomado los hechos, rechazados por numerosos sectores sociales, académicos y políticos de Estados Unidos.

Refieren los medios de prensa citados que Integrantes del KKK, junto a ultraderechistas, neonazis y otras bandas del mismo estilo marcharon para protestar por la decisión del gobierno local de retirar de un parque la estatua del general Robert E. Lee, uno de los defensores del régimen esclavista durante la Guerra de Secesión del siglo XIX en el país norteño.

El hecho fue clave para el enfrentamiento del KKK con ciudadanos que protestaban contra el odio, el racismo, la discriminación y el nacionalismo a ultranza. Según las fuentes citadas, James Alexs Fields Jr., conocido como activo entre los supremacistas blancos, agredió a los pacifistas, mató en ese instante a Heather Heyer y causó heridas a otros 20, mientras dos personas más fallecieron al estrellarse un helicóptero de la policía.

Las palabras que tales hechos motivaron al presidente Trump fueron las siguientes: "Condenamos en los términos más firmes esta exhibición atroz de odio, fanatismo y violencia procedente de varios lados".

¿Qué quiso decir Trump con ese “varios lados”? ¿Acaso defender la paz, la no violencia, la concordia ciudadana y otros valores de convivencia sin odio se puede equiparar al fanatismo y la muerte que el KKK tradicionalmente ha defendido y ejercido en los Estados Unidos? ¿Quiere decir Trump que él comulga con Dios y con el Diablo?

De acuerdo con la referencia objetiva de los sucesos la violencia y la muerte llegó desde el bando de odio, el mismo que la política de Trump despierta y respalda cuando tilda indiscriminadamente a los inmigrantes de criminales.

Fue tal el impacto negativo de las declaraciones de twitero Trump, que incluso demócratas y representantes se unieron para rechazar anfibológicas declaraciones del Señor del Trono, el mismo que amenaza a diario con utilizar todo el arsenal nuclear de su país para imponer su punto de vista, como si Estados Unidos formara parte de las empresas Trump.

La líder demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, afirmó que “las declaraciones del presidente sobre violencia ‘en muchas partes’ ignora la vergonzosa realidad actual del supremacismo blanco en nuestro país, y continúa con un patrón de complacencia en torno a esos actos de odio”.

Analistas recuerdan que tales grupos expresaron su apoyo a la campaña electoral de Trump y que varios de ellos, como la llamada Derecha Alternativa, conocida en ese país como “alt-Right”, celebró el arribo del magnate a la Casa Blanca.

Algunas corrientes de ese grupo preconizan una limpieza étnica pacífica en Estados Unidos y la proclamación de un Estado Blanco sobre las bases del ideario neonazi.

Ku Klux Klan quiere más policías que maten a negros en EE.UU.

El grupo estadounidense de extrema derecha Ku Klux Klan (KKK) consideró que el país necesita hoy más policías que maten a negros, al respaldar el asesinato del joven Michael Brown en Ferguson, Missouri, refieren despachos de prensa.

Para la organización, que promueve la xenofobia y la supremacía de los blancos, el policía que le propinó varios tiros al adolescente de 18 años "es un héroe".

"Estamos estableciendo un fondo-recompensa para el oficial de policía que disparó a este matón", dijo el KKK en un correo electrónico, citado en la página digital Raw Story.

Sin embargo, Brown caminaba desarmado por su comunidad y según testigos fue ultimado cuando se encontraba parado con las manos en alto. Su madre, Lesley McSpadden, expresó que el joven no molestaba a nadie y que había concluido sus estudios secundarios y comenzaría próximamente en la universidad.

El homicidio del muchacho el pasado 9 de agosto ha desencadenado una ola de protestas en esa ciudad del estado de Missouri, las cuales se han extendido a Nueva York, Chicago, Oakland, Detroit, Charlotte, Denver, entre otras urbes.

El presidente Barack Obama llamó la víspera a "la paz y la calma en las calles" de Ferguson y advirtió que "no hay excusa" para la fuerza policial excesiva, en referencia a la represión contra los manifestantes que exigen esclarecer la muerte de Brown.

En los pasados cinco días no han cesado las protestas en esa localidad, donde la policía ha empleado gases lacrimógenos, bombas de humo y balas de goma. Durante las más recientes jornadas se registró una decena de personas arrestadas, incluyendo dos reporteros (de The Huffington Post y The Washington Post).

El diario USA Today aseguró que en Ferguson utilizan armas proporcionados por el Pentágono contra los manifestantes.

(*) Ku Klux Klan (KKK) es el nombre adoptado por varias organizaciones de extrema derecha en Estados Unidos, creadas en el siglo XIX, inmediatamente después de la Guerra de Secesión, y que promueven principalmente la xenofobia, así como la supremacía de la raza blanca, la homofobia, el antisemitismo, el racismo y el anticomunismo.[1] Con frecuencia, estas organizaciones han recurrido al terrorismo, la violencia y actos intimidatorios como la quema de cruces, para oprimir a sus víctimas. (TVY)Con informaciones de agencias y archivos del autor)