Sostenida Injusticia de 16 años

 

Roberto Pérez Betancourt 

El caso de los  antiterroristas cubanos, condenados injustamente durante un proceso irregular en la ciudad estadounidense de Miami,  cumplirá 16 años   el 12 de septiembre próximo. Aun permanecen tras las rejas a Gerardo Hernández, Ramón Labañino y Antonio Guerrero.

 Sus compañeros Fernando González y René González se hallan en Cuba luego de haber cumplido sus injustas sentencias.

   Las más recientes noticias procedentes del ámbito de los activistas a favor de la libertad de los patriotas, apuntan en el sentido de que el  pueblo norteamericano se inclina mayoritariamente hacia un cambio en la política de Estados Unidos hacia Cuba.

   Así lo reconoció René González en videoconferencia que en junio último conectó vía Internet a Washington y La Habana.

  En opinión del lingüista  Ignacio Ramonet, existe la posibilidad de que el presidente Barack Obama busque “soluciones creativas” si quisiera liberar a Hernández, Labañino y Guerrero, mientras que el experimentado abogado José Pertierra afirma  que es esta  la primera vez que el caso de os cinco entra en el radar de la opinión pública estadounidense.

  En esa cuerda se  escucharon  otras  opiniones de activistas en  Washington, durante las actividades  organizadas por el Comité Internacional por la Libertad de estos antiterroristas, evento que imprimió nuevo  impulso en esta batalla política, en el camino de generar un movimiento de tales proporciones que le resulte imposible a la administración Obama mantenerlos a los cubanos antiterroristas en prisión, como pidió allí la activista por la paz Cindy Sheehan.

   En la citada ocasión, Parlamentarios de 10 países viajaron a Washington. También lo hicieron abogados, artistas, escritores, líderes religiosos, sindicalistas y amigos en general de Cuba y de los Cinco, provenientes de 31 naciones, quienes  pidieron  un cambio en la política estadounidense hacia la Isla y en ese contexto la liberación de los tres luchadores cubanos, consecución que no debe esperar con dedos cruzados, sino seguir activando las motivaciones a escala mundial para que el clamor de libertad continúe  fortaleciéndose dentro de Estados Unidos y ayude a ejercer el impulso decisivo que necesita parar la injustica de 16 años en el caso de Los Cinco.