Fidel Castro en las páginas del Mundo
Roberto Pérez Betancourt
Este sábado 13 de agosto, Fidel Castro cumple 85 años de edad. Su nombre está en las principales páginas del mundo periodístico, sobre todos los soportes, y en profusión en el digital, en medios de prensa clásicos, reaccionarios y revolucionarios, y en otros llamados alternativos, digitales, esos que escudriñan la noticia, sacan a la luz lo que otros no publican, son irreverentes, apocalípticos o integrados, pero están ahí, globalizando la comunicación social a escala jamás imaginada.
Los adversarios se asombran del hombre excepcional, incólume en más de 300 atentados organizados por la CIA, e implícitamente, sin quererlo, prodigan elogios a los méritos revolucionarios de quien ha merecido tanta ocupación por parte del aparato más represivo que se conoce. Otros señalan la increíble vitalidad de Fidel, que ha sobrevivido a 11 administraciones norteamericanas y 170 presidentes en Latinoamérica. Algunos hacen el recuento de los momentos más difíciles afrontados por la Revolución a lo largo de 52 años, y no faltan los que, invocando a dioses mitológicos en oráculos virtuales, pretenden por enésima vez visualizar el futuro y augurar desastres.
En todos los medios, este 13 de agosto el Líder de la Revolución cubana, Fidel Alejandro Castro Ruz, es noticia de sobrevivencia, pasión, entrega, rebeldía, inspiración y asombro, por derecho propio.
Simpatizantes y detractores admiten que la estatura humana de Fidel posee relieve universal. Unos elogian sus aptitudes y virtudes revolucionarias. Otros aluden a su papel en la historia. Los más críticos van a lo que consideran lunares del sol y evaden hablar de la luz.
Lo cierto es que la historia del siglo 20, y ya buena parte de los dos primeros decenios del 21, no pueden prescindir de Fidel, enriquecido por la experiencia acumulada, reposado en sus años de madurez, vital aun como adolescente de la quinta edad.
Sin excluir sectores ni tendencias, existe unanimidad cuando se trata de apreciar la estatura alcanzada por este ser humano nacido en 1926, en un rincón oriental de la isla, nombrado Birán, quien se graduó de derecho en 1950 y desde época temprana dedicó su vida a luchar contra la corrupción y la injusticia social que imperaban en su país.
Alzándose contra múltiples obstáculos, Fidel organizó el asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes para dar el clarinazo que rebelara al pueblo contra la dictadura pro imperialista de Fulgencio Batista; sufrió cárcel, marchó al exilio, creó el Movimiento Revolucionario 26 de Julio, aglutinó con su ejemplo a las fuerzas políticas internas, organizó una expedición armada, formó y comandó un ejercito guerrillero en la Sierra Maestra, fue el artífice de la victoria frente al ejército dictatorial y los oligarcas internos y externos; Fidel guió al pueblo en el combate frente a invasores mercenarios, saboteadores y traidores, aceptó el reto de amenazas imperiales, su mente lúcida rechazó provocaciones, entrenó a las multitudes para resistir y vencer en los ámbitos político, económico, cultural y militar, inculcó el espíritu internacionalista, y su tenacidad guió a Cuba por los senderos de la gloria en la construcción del socialismo frente a todas las adversidades posibles de imaginar, y la liberación de otros pueblos hermanos, y aún más.
Esa obra, de amor, justicia e igualdad, multiplicada por la acción de todos los cubanos, es el más alto tributo de homenaje a este hombre, cuyos compatriotas y amigos sinceros nombran sencillamente Fidel, un ser humano que al cumplir hoy 85 años de edad, sigue asombrando con su proverbial capacidad y la vitalidad con la que ha superado difíciles circunstancias de la vida.
El multivalente ejemplo que emana de la ejecutoria de Fidel se ha multiplicado en la mayoría de sus compatriotas en las fronteras isleñas y mucho más allá; alcanza planos universales, al tiempo que su sencillez de ciudadano lo lleva siempre a repetir con Martí que toda la gloria del mundo cabe en un grano de maíz.
El regalo más hermoso que Fidel recibe es el agradecimiento de su pueblo, muchedumbre de inteligencias en la que cada día él mismo renace y se multiplica. Como dijera nuestro José Martí: "A esta luz que traspasa muros es imposible cerrarle las puertas". Por estas, y muchas más razones, hoy, simplemente, le decimos, felicitaciones eternas, compañero Fidel. (TVY)(12/08/11).
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