Crónicas, complicidades y propósitos
Roberto Pérez Betancourt
Dedicada especialmente al género Crónica, la Peña Debate Abierto del jueves 27 de mayo, en la casona de la Unión de Periodistas de Cuba, en la ciudad de Matanzas, contó con la asistencia de una treintena de colegas y la conspiración fraternal de unos cuantos, entre los que destacaron Barbarita, Yirmara, Ana, Herácleo, Manuel, Aylín y mi hermano Rolando, presente este desde Londres, gracias a la magia de la Internet, además de Edelma, mi esposa, quienes se pusieron de acuerdo para poner al borde del infarto a este humilde anfitrión, regalándole un agasajo sorpresa por las siete décadas transitadas, que nos permitió enriquecer el disfrute entre amigos con abundante cake, pastelitos, bocaditos, y muchas otras degustaciones gratamente elogiadas por todos.
Antes, nos dimos la oportunidad de enfrascarnos en análisis de estilos y propósitos de la Crónica, coordinamos acciones comunicativas y sobre todo nos pusimos de acuerdo en la necesidad de seguir contribuyendo a difundir la verdad de Cuba en el mundo, desde Matanzas y cualquier otro sitio en que nos encontremos, a través de los modestos esfuerzos de los periodistas insertados en la red de redes, con el propósito esencial de desnudar las mentiras que reiteran los centros orquestados desde Estados Unidos y Europa, quienes han intensificado las acciones de su guerra mediática dirigida a falsear la realidad en la Isla y multiplicar infundios a través de una clara campaña desinformativa, que incluye la exclusión en la gran prensa internacional de los hechos que demuestran la solidez de la Revolución y de la obra de justicia social que, a pesar de las dificultades económicas coyunturales, no se detiene, porque se asienta sobre la base de la honestidad y la solidaridad, con mirada autocrítica hacia adentro que nos permita identificar errores para ayudar a suprimirlos y contribuir a que se instrumenten cambios necesarios en nuestra sociedad perfectible, a través del ejercicio periodistico, sin cortapisas ni serviles condicionamientos tarifados, sino desde la consciente comprensión de que obramos por una causa de justicia social que compartimos, de corazón, aplicando neuronas, sin exclusiones gratuitas, estrechando brazos sobre barreras artificiales, brindando nuestra solidaridad y amistad a todos los que estén en disposición de reciprocarlas con cordura, decencia, sincero amor por Cuba y aprecio infinito al ser humano.
Nos volveremos a reunir el jueves 24 de junio en la casona de la UPEC. Hasta entonces nos quedan muchas jornadas de creación. Desde ahora extiendo la invitación a todos los colegas y amigos interesados en seguir remando en este bote con proa hacia el crecimiento profesional y la solidaridad activa.
Los invito ahora a ver lo que escribieron Barbarita y Yirmara en sus respectivos blogs en las direcciones:
http://pedazodecuba.blogspot.com/2010/05/pena-con-cronica-y-sorpresa.html
Blog de Yirmara Torres pedazodecuba
Blog de Bárbara Vasallo: Barbarísima
4 comentarios
ANONIMO -
El hombre llegó a la óptica Capitolio. El problema era sencillo: reemplazar el pequeño tornillo que sujeta la pata a la armadura. No tardaría ni dos minutos.
-Espere un momentico, enseguida lo atiendo - dijo la recepcionista, mientras hablaba animadamente por teléfono. La espera y la impaciencia se alargaban. El hombre optó por aplacar la ira y comenzó a moverse intranquilo alrededor de la muchacha. El método dio resultado.
- Mi vida, hay un cliente que parece apurado. Cuando lo atienda, te vuelvo a llamar. Un besito dijo la empleada, y colgó-. ¿Qué desea?
-Mire, el tornillito
-Sí, pase al departamento de reparaciones, aquí al lado. Pregunte por Maritza, la técnica; es una gordita. Haga la cola y espere.
El departamento era una pequeña mesa con instrumentos de trabajo, la silla, la lámpara sobre la mesa y un banco de madera para los clientes.
-¿En qué puedo ayudarlo?
-Mis gafas, se zafó un tornillito.
-¿Lo trajo?
-¡Qué va! Se me cayó en la guagua. Y gracias que encontré la pata. ¿Cómo voy a encontrar un tornillo tan chiquito en una guagua llena? Si lo hubiera encontrado yo mismo lo pongo.
-Lo siento, señor, no tenemos tornillos.
-¿Cómo? ¿No tienen un tornillo para mis espejuelos? ¿Cómo se explica esto?
- Hace más de un año la empresa no los envía, señor, porque dicen que no tienen, ya usted sabe, el embargo
-¿El embargo? ¿Qué embargo?
-Vuelva dentro de dos meses, o llame por teléfono. Si la línea está ocupada, insista. A lo mejor para entonces ya nos mandaron los tornillitos. Tenga paciencia y haga como todos: amarre la pata con un alambrito, y resuelto el problema.
viva el socialismo de pachanga!
Roberto -
SUPERMAN -
Ramon Bello -
Como lector y como matancero me uno a las felicitaciones de todos en esta fecha. En hora buena y que sigas creando. Ramon Bello