Vigentes verdades sobre doble moral antiterrorista
Por Roberto Pérez BetancourtUn lustro después que Fernando González Llort pronunciara su alegato en la vista de sentencia, el 18 de diciembre de 2001, las verdades contenidas en sus palabras todavía suenan como vigentes martinetes, denunciadores de la doble moral antiterrorista del gobierno norteamericano de W. Bush.Esa comprobada realidad prueba la injusticia cometida contra González Llort y sus otros cuatro compañeros, todos verdaderos luchadores antiterroristas.Fernando recibió 19 años de cárcel. A René González, Gerardo Hernández, Ramón Labañino, y Antonio Guerrero, sus hermanos de batalla, les dictaron penas que, en conjunto, se elevan a cuatro cadenas perpetuas más 77 años de prisión.Estos hombres fueron apresados en septiembre de 1998 y sometidos a un politizado juicio en Miami, sin reales garantías procesales, que concluyó en 2001 por infiltrar a grupos extremistas anticubanos, organizadores y ejecutores de sabotajes, quienes operan en el sur de la península de Florida con la anuencia de Washington, El propósito de Los Cinco era alertar a las autoridades sobre acciones criminales que han sembrado el luto en Cuba, en los propios Estados Unidos y en otros países, según consta en largo expediente, pero, lejos de actuar contra los verdaderos terroristas, las entidades gubernamentales norteamericanas volcaron su represión contra los patriotas antillanos.En sus palabras ante el tribunal, Fernando fue desgranando hechos demostrativos de que el odio irracional hacia la Revolución cubana ha sido premisa rectora de la actuación fiscal, cuyas acciones se encaminaron desde el principio a condenar a toda costa la actitud sincera y honesta de Los Cinco, en tanto protegía a los verdaderos terroristas. Más que autodefensa, la exposición de Fernando devino denuncia contundente de la historia de agresiones contra Cuba fraguada por los propios gobernantes norteamericanos desde el triunfo mismo de la Revolución, el primero de enero de 1959. “... Una historia en la que a la guerra económica, la agresión biológica, la guerra psicológica a través de la propaganda y las amenazas de agresión militar, se unen el terrorismo, el sabotaje, las acciones paramilitares y los intentos de asesinato de los líderes políticos de la Revolución, originados casi todos desde el sur de la Florida”, afirmó.
Y trayendo a colación las actividades de Los Cinco, recordó Fernando: “Cuba, que ha sufrido ataques terroristas durante 42 años, tiene derecho también a defenderse de esa manera. Hoy la nación americana se une en la lucha contra el terrorismo, algo que para mi país ha sido una necesidad y una realidad desde hace muchos años.“No puede haber doble rasero. El terrorismo debe ser combatido y eliminado tanto si se comete contra un país grande y poderoso como si es contra países pequeños. No hay terrorismo malo y terrorismo bueno.”
Recordó González Llort que los grupos terroristas de la extrema derecha cubana de Miami fueron creados, entrenados y financiados por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) norteamericana, como lo prueban documentos desclasificados por el propio gobierno de los Estados Unidos en 1997 y 1998.
Uno de esos escritos refiere una reunión entre funcionarios de alto nivel, encabezados por el entonces vicepresidente Richard Nixon, en la que se aprobó el llamado "Plan de acción encubierta contra el régimen de Castro". Recordó Fernando los vínculos de los extremistas de origen cubano con fundamentalistas de extrema derecha de la política norteamericana, en episodios tales como el asesinato del presidente Kennedy, el escándalo Watergate, el asesinato de Orlando Letelier y Ronni Moffit, y el suministro clandestino de armas a la contra nicaragüense. Y afirmó: “Quizás la complicidad y lealtad a ese sector político de esta sociedad es la que les garantiza la impunidad en sus acciones contra Cuba, brindándoseles la seguridad de que sus actividades serán pasadas por alto por las autoridades e incluso de que se ejercerán presiones políticas en su favor en caso de ser apresados. Los hechos demuestran que así ha sido.”Sucesos posteriores corroboran las palabras de Fernando, como se aprecia en el escandaloso manto que la Administración de W. Bush tiende sobre el terrorista Luis Posada Carriles, a quien se niega a extraditar a Venezuela para que responda de sus crímenes, incluido el sabotaje a una nave de Cubana de Aviación donde perecieron 73 personas.Orlando Bosh, coautor de la misma fechoría, vive en Miami gracias al “perdón” que le otorgó el ex presidente George Bush, padre del actual mandatario.Recordó Fernando que los sucesos del 11 de septiembre de 2001, cuando fueron derribadas las torres gemelas de Nueva York por el intencionado impacto de aviones conducidos por terroristas, fueron transmitidos en directo por televisión, sin embargo, ninguna de esas televisoras ha reseñado las agresiones sufridas por Cuba. Al respecto, citó palabras del presidente Bush, cuando dijo: "... Nos uniremos para fortalecer a nuestras Agencias de Inteligencia para así conocer los planes de los terroristas antes que estos actúen, y encontrarlos antes de que ataquen."Y trayendo a colación las actividades de Los Cinco, recordó Fernando: “Cuba, que ha sufrido ataques terroristas durante 42 años, tiene derecho también a defenderse de esa manera. Hoy la nación americana se une en la lucha contra el terrorismo, algo que para mi país ha sido una necesidad y una realidad desde hace muchos años.“No puede haber doble rasero. El terrorismo debe ser combatido y eliminado tanto si se comete contra un país grande y poderoso como si es contra países pequeños. No hay terrorismo malo y terrorismo bueno.”
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