Argentina: Llegan los Fernández al poder; Macri se va cuesta abajo

Roberto Pérez Betancourt

 

Se veía venir y lo anticipamos cuando afirmamos en reciente comentario que  Mauricio Macri se iría cuesta abajo en su rodada en la primera vuelta electoral argentina. ¡Y se va!, por decisión abrumadoramente mayoritaria del pueblo de ese país,  que salió a votar el domingo contra el neoliberalismo y la pobreza extrema a la que condujo la política derechista  que volvió a endeudar al país sudamericano en las fauces del Fondo Monetario Internacional (FMI), dejando una realidad de gobierno difícil para los electos Alberto Fernández, presidente, y Cristina Fernández, vicepresidenta, candidatos del Frente de Todos.

   El domingo fue un día tenso, difícil;  también aniversario de la muerte de Ernesto Kirchner y del natalicio de Luis Inacio Lula da Silva,  ex presidente de Brasil,  injustamente en prisión y por cuya libertad se libra un combate frontal en diversos países mediante la movilización popular.

   Fue alegre también el domingo para la inmensa mayoría de los argentinos y los progresistas del mundo, quienes festejaron y mostraron su alegría a través de las cámaras de Telesur, que siguió todo el tiempo el desarrollo en vivo de los comicios, ofreciendo detalles, encuestas a pie de urnas y partes oficiales.

   Antes de las nueve de la noche todas las encuestadoras ya daban por seguro el triunfo del Frente de Todos por amplio margen.

  Cuando llegaron los primeros resultados oficiales al cierre de urnas,  la diferencia en la ventaja de los Fernández era inferior a la que se había anticipado, y hasta se temió por una segunda vuelta electoral, que finalmente no llegó, porque bastó el 48 por ciento de los votos totales para vencer al 40 por ciento de Macri.

  Según la ley argentina, para ser elegido presidente es necesario alcanzar al menos 45% de los votos o por lo menos 40% y una diferencia de diez o más puntos porcentuales respecto del segundo candidato más votado.

   Recordemos en el las elecciones de agosto para elegir las candidaturas, según la modalidad electoral argentina, Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO),  Fernández logró el 49,49 % del apoyo popular, mientras que Macri obtuvo tan solo el 32,93 %, lo que se consideró una diferencia sorprendente e imbatible en las elecciones oficiales del domingo último.

   ¿Por qué se redujo la brecha? Obviamente, agosto sirvió a las fuerzas de derecha para alertarles sobre la evidente irreversibilidad de la decisión popular, y a la vez  les indicó a muchos votantes que debían  desplazar  los sufragios de otros aspirantes (eran seis en total) hacia Macri para intentar frenar a los Fernández.

   Así se acortó algo la diferencia, pero prevaleció la inmensa mayoría de la voluntad de cambiar el neoliberalismo y traer de vuelta al Peronismo al poder, en procura de mejorar  la justicia social, dentro de los cauces permisibles del sistema capitalista.

  Más de 30 millones de argentinos estaban habilitados para votar y elegir a las nuevas autoridades, las cuales tendrán un mandato de cuatro años. El próximo presidente de Argentina asumirá el cargo el 10 de diciembre de 2019. 

 

Palabras de Alberto Fernández

 

  "Vamos a ser la Argentina que nos merecemos, vamos a volver a construir el país que soñamos", expresó el mandatario electo ante las cámaras televisivas que llevaron sus palabras al mundo.

  "Gracias por el compromiso que han demostrado por construir una Argentina más solidaria, humanitaria, que defienda la salud pública, la educación pública, una Argentina que privilegia a los que producen, a los que trabajan", dijo Alberto Fernández, quien agregó  que las fábricas volverán a funcionar para mejorar la vida de todos los argentinos.

"Gracias también a los que no nos votaron por haber participado en esta jornada, este no es el Frente de nosotros, es  el Frente de Todos, nació para incluir a todos los argentinos y a todos los argentinos estamos convocando", enfatizó.

 

Sonado triunfo también en la gobernación de Buenos Aires

 

  El ex ministro de Economía, Axel Kicillof, quien fue electo gobernador de la provincia de Buenos Aires, por amplia mayoría, derrotando al candidato de Macri,  fue el primero en hablar desde el búnker del Frente de Todos y destacó el triunfo popular.

   "Hubo un triunfo categórico tanto en provincia como a nivel nacional por eso estoy con el Presidente electo y la Vicepresidenta electa. Ha sido crucial la unidad del campo popular", expresó desde la tribuna, acompañado por Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner.

  "Vamos a gobernar la provincia y la nación para crear trabajo y apuntalar la educación y la salud pública y devolverles los derechos", aseveró Kicillof.

Asimismo,  Cristina Fernández, ahora vicepresidenta electa de Argentina, agradeció a toda la población por haber ejercido su derecho al voto, en unos comicios que una participación histórica de 81 por ciento del padrón electoral.

 

Argentina en crisis social y económica

 

   Telesur recuerda que las elecciones generales se realizaron en medio de una profunda crisis social y económica agudizada tras la “ayuda” financiera acordada entre el Gobierno de Macri y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

  De acuerdo a los informes del Instituto Nacional de Censo y Estadísticas (Indec) durante los cuatros años del Gobierno de Mauricio Macri se incrementaron los índices asociados a la pobreza multidimensional, la precarización laboral y una aguda caída de la calidad de vida de la mayoría de los argentinos.

  En una alocución pública televisada, el presidente derrotado Mauricio Macri, reconoció la victoria de los Fernández, se mostró conciliatorio, invitó al ganador a desayunar este lunes para hablar de lo mucho que le espera por hacer, y trató de dejar un mensaje a sus partidarios, de  esperanza en un futuro retorno al poder, a pesar de que sabe, lo sabe muy bien, de que seguirá cayendo cuesta abajo y de que lo esperan varios encausamientos judiciales…

   La pobreza se incrementó en el primer semestre del año alcanzando al 35,4% de la población argentina, el desempleo subió en el segundo trimestre al 10,6% y la inflación acumulada en los primeros nueve meses fue de 37,7%, según datos oficiales.

  Las agencias de prensa se han hecho eco de inmediato de los mensajes de saludos enviados a Alberto y Cristina por parte de Evo Morales, presidente de Bolivia, Rafael Correa, ex mandatario de Ecuador y otras personalidades que aplauden el éxito comicial contra la extrema derecha y la plutocracia que desde el exterior ve con  disgusto el avance de las fuerzas progresistas, tras la reelección de Evo y la caída en picada del macrismo y los macristas, situación que pone nervioso al presidente brasileño Jair  Bolsonaro,  imitador de su ídolo confeso, Donald Trump,  abocado a un juicio político en el norte imperial por decisión de los demócratas, que están juntando pruebas y testimonios para ponerle el letrero de ¡Go home!, al rubio despeinado.

Así van las cosas por nuestro entorno latinoamericano, caribeño y norteño, sin olvidar al señor Almagro, el títere secretario  de la OEA y sus llantos plañideros ante la extrema derecha de Miami para intercedan a fin de renovar su mandato en el ministerio de colonias yanquis, en fin de cuentas, puede quedarse sin empleo, y a su edad, y con la mala reputación que se han ganado, ¿a dónde iría a parar?... Siga por aquí, en estos días les cuento más… (TVY)